COMO HERMANAS: K

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Dicen que los perros se parecen a sus amos. Desde luego compartimos el amor por el bacon, el sofá y el placer de acabarnos un yogur. Tenemos ese punto torpe pero estiloso (y los envidiosos que no comenten) y nos encanta quedarnos dormidas al sol.

Y ahora ya no estás. Separarme de ti ha sido lo más duro que he tenido que hacer nunca. La sensación de desear algo con todas mis fuerzas y saber que no importa lo mucho que lo intente porque nunca lo conseguiré.

Has sido una hermana, un despertador, un jueves y una manta estupenda. Dicen que no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes. Yo lo sabía y nunca lo olvidaré.

Declaro las 20.00 como tu momento del día. No importa lo que esté haciendo o en que esté pensando… Durante un minuto al día volveré a estar contigo.

Siempre te querré Kyla y nadie podrá borrar tu recuerdo.

COMO HERMANAS: V

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Una primera aclaración: soy hija única.

Pero tengo hermanas muy especiales (o peculiares), de las que ya os iré hablando. Hoy toca hablar de V. Empieza a hacerse mayor!

V es mi hermanita pequeña, mi mimada protegida. Sus principales características hacen que podamos pasar como hermanas de verdad: torpeza, sonrisa fácil y demasiada facilidad para decir tonterías. Pero en lo físico es otra cosa… Con sus 173 cm de altura se le podría confundir fácilmente con una modelo. Su carita de niña buena, su tipazo y su melena al viento también influyen.

Pero lo mejor de V, y con diferencia, es su sonrisa. Contagiosa, rápida y alegre podría causar epidemias de felicidad sin darse cuenta. Si el señor Profident la conociese sería su nueva imagen.

Sabéis cuando superman aparecía y la gente gritaba:

«¿Qué es eso? ¿Un pájaro? No! ¿Un avión? Tampoco! Es superman!«

Pues V aterriza aun mejor que superman. No es ni un avión ni un pájaro y por supuesto no tiene superpoderes voladores. V es torpe, pero que muy torpe. 

Tropieza con el aire

y pelea contra el viento,

es amante del suelo

y por ello siempre va a su encuentro.

Por último un consejo para conocerla: Se sincero, se amable y ella se encargará del resto. Eso si, no le hagas daño.